Salome Martínez

Amplía UDEM oferta académica al lanzar carrera de Licenciado en Estudios Humanísticos

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RECTOR 2

Por Fanny Martínez

 

Para atender los debates más importantes de mundo actual, la Universidad de Monterrey amplía su oferta académica con la creación del programa de Licenciado en Estudios Humanísticos y Religiosos.

A partir de agosto próximo, iniciará sus estudios la primera generación de esta nueva carrera, que formará profesionistas que desarrollarán un liderazgo moral y religioso, con bases interdisciplinarias.

El lanzamiento de la carrera se realizó esta mañana con la conferencia “Educación religiosa para el siglo XXI: los nuevos retos”, ofrecida por el doctor Luis Eugenio Espinoza, teólogo y profesor de la UDEM, en la Sala de Eventos del Centro de la Comunidad.

En la presentación de la carrera participaron el rector Antonio J. Dieck Assad; Fernando Mata Carrasco, vicerrector Académico; José Honorio Cárdenas Vidaurri, director de la División de Educación y Humanidades y Javier García Justicia, director del Departamento de Humanidades.

José Luis Solís Olivares, director de Programas Académicos Asociados a  Humanidades y director de la nueva carrera, explicó que LEHR cuenta con una colegiatura diferenciada con valor del 15 por ciento menos que el resto de los programas académicos, debido a que toca los orígenes fundacionales de la Universidad.

El profesional egresado de este programa académico puede laborar en los ámbitos educativo, social o de gestoría y consultoría empresarial, de acuerdo con Solís Olivares.

Entre los roles que puede desempeñar, figuran los de creador y promotor de organizaciones no gubernamentales, coordinador de programas de justicia social, dirigente en áreas de cultura, desarrollo social o atención a la juventud, diseñador de programas de impacto social en instituciones filantrópicas, consultor y diseñador de temas de ética empresarial y responsabilidad social o coaching filosófico y espiritual, entre otros.

El egresado podrá desarrollar una interpretación integrada y coherente de su entorno desde las perspectivas de la Teología, Filosofía, Educación, Psicología y Humanidades.

Además, estará facultado para abordar y proponer soluciones a las necesidades y los dilemas actuales de las sociedades que integran diversas culturas.

El rector Dieck Assad destacó el entorno en que se realza el lanzamiento de la carrera, como el ministerio espiritual del nuevo Papa, que ha traído consigo un espíritu de sencillez como forma de aproximación al Evangelio, que da nuevos bríos a la Iglesia y contagia a la juventud de una búsqueda de trascendencia.

ASISTENTES

“Me atrevo a considerar que no podría darse un mejor momento para introducir en nuestra amplia oferta académica la Licenciatura en Estudios Humanísticos y Religiosos; asumimos este privilegio con gran responsabilidad”, afirmó.

El directivo universitario confió en que cada vez es mayor la apuesta por un pensamiento crítico, propositivo y humanista, necesario para desarrollar una sociedad armónica en medio de falsos dilemas cuyas consecuencias cada vez nos pesan más, como los que hay entre el progreso mal entendido y el sentido humanitario.

Dieck Assad comparó el ambiente actual del lanzamiento de la carrera con el de la época de la fundación de la UDEM, a cuatro décadas y media, desde la perspectiva de los difíciles retos que enfrenta hoy la humanidad y, de forma muy especial, los jóvenes, quienes viven inmersos en un océano de datos, pero sin información.

“Asistimos a una cita largamente esperada (…), ponemos a disposición de la comunidad en general una propuesta educativa que resume, de forma muy especial, las dos vertientes de nuestro trabajo: el estudio formal de la faceta humana que dota de sentido a nuestra existencia y su origen divino, su sentido de trascendencia, su relación con Dios”, explicó.

En su ponencia, Espinosa señaló que más allá de los datos cuestionables, lo que aparece como retador para el estudioso de las religiones en el siglo 21 es el proceso constante de sacralización que actualmente se vive.

“Estudiar una religión es madurar nuestra capacidad de análisis lingüístico y nuestra visión de las personas que nos rodean… es percibir la riqueza y los riesgos de pretender reducir una dinámica impresionante con misioneros y pastores que vemos como esa flecha que se dirige al individuo que sacude y cuestiona los ídolos comunitarios que vemos en sentido contrario”, mencionó.

 

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