Carreteras cortadas, cortes de luz, estaciones de metro cerradas, suspensión del tráfico de tranvías y del transporte marítimo, locales inundados y árboles derribados son algunas de las consecuencias de las lluvias torrenciales que hoy caen sobre Grecia, especialmente en la región capitalina del Ática.
En esta región, los bomberos recibieron unas 700 llamadas telefónicas para bombear aguas en casas y tiendas inundadas, para lo que se han empleado 50 camiones cisterna.
(EFE)