Este símbolo objeto, que representa autoridad y compromiso comunitario en las culturas indígenas de las huastecas, marca el inicio de las festividades del Día de Muertos en el municipio, un evento destacado por su integración de rituales ancestrales y la herencia cultural de la región.

El Xantolo, una celebración milenaria que honra a los muertos, se desarrolla en tres fechas clave y lugares icónicos de García, como el Palacio Municipal y los parajes de San José y la Nueva Huasteca en Mina. Este evento reúne a comunidades de distintos estados y presenta danzas, comparsas, y gastronomía típica, como el zacahuil y el pan artesanal, preservando las raíces culturales de los pueblos originarios que residen en el estado.

La entrega del bastón de mando al alcalde, junto con las palabras de Liberio Porfirio Hernández, presidente fundador del Consejo Indígena, simbolizan el vínculo entre la administración local y los pueblos originarios para preservar y promover sus costumbres.

Manuel Guerra Cavazos destacó la importancia de mantener vivas estas tradiciones: “Este compromiso es para siempre. Cuenten con que siempre voy a buscar que a los pueblos originarios les vaya bien”. Guerra también recalcó que el municipio apoya la realización de estas festividades a través de la Dirección de Asuntos Indígenas, una iniciativa que fortalece la identidad multicultural de García y el lazo con las familias de orígenes diversos que han elegido este municipio como su hogar.

Además, el festival incluyó la participación de comparsas tradicionales de diversos estados y un espacio para la lengua náhuatl, los dialectos huasteco, otomí entre otros generando un ambiente que invita a las nuevas generaciones a conocer y celebrar sus raíces. Las festividades continuarán hasta el 2 de noviembre, cerrando con una gran celebración en la Nueva Huasteca, donde la danza y la música serán protagonistas en una noche con cielo plagado de estrellas que se extenderá hasta el amanecer.